Recorre Valencia en dos días

La esencia mediterránea de la ciudad en 48 horas

Solo tienes un par de días para estar en Valencia y no quieres perderte nada de lo esencial. Este es tu post.

Una buena idea es empezar dando un paseo por el Centro Histórico con un guía experto (simpático y oficial) que te puede poner al día de los sitios más interesantes de la parte vieja de la ciudad. Te enseñará la plaza de la Virgen, las Torres de Serranos, la Lonja, San Nicolás, la plaza redonda, el Mercado Central y la Catedral en un recorrido para ver los highlight. Puedes acudir a uno de los tours de Menta Valencia, los hay para todos los gustos. A la hora de comer ya habrás abierto el apetito y, estando en Valencia, te apetecerá probar un buen arroz. Tienes muchas posibilidades para explorar y elegir el sitio que más te convenza.

Vista de una parte de la bóveda de la iglesia de San Nicolás.

La arquitectura más vanguardista

Después de la sesión gastronómica podemos ir a conocer la Ciudad de las Artes y las Ciencias, uno de los complejos arquitectónicos más icónicos e identificativos de Valencia, construido por Santiago Calatrava, que alberga el Museo de las Ciencias, el Hemisfèric, el Palau de les Arts y el Oceanogràfic. El museo cuenta con exposiciones interactivas y animaciones para conocer los avances de la ciencia; el Hemisfèric fue el primer edificio del complejo que abrió sus puertas al público. Es una construcción espectacular que cuenta con una cubierta ovoide de más de 100 metros de longitud, que alberga en su interior la gran esfera que constituye la sala de proyecciones; el majestuoso edificio de la ópera supone la mejor infraestructura para la ópera y los grandes espectáculos musicales; el Oceanogràfic es el mayor acuario de Europa y en él se representan los principales ecosistemas marinos del planeta. Para llegar hasta allí puedes optar por alquilar unas bicis e ir por el Jardín del Turia desde el centro hasta la Ciudad de las Artes. Es un paseo muy agradable por el cinturón verde que se despliega por el antiguo cauce del río y da lugar al mayor jardín urbano de España.

Ciudad de las Artes y las Ciencias (Foto: Visit Valencia)

Por la noche, si te quedan fuerzas, es interesante dar un paseo por la plaza del Negrito, por la plaza del Collado o por la plaza del Tossal, en las tres plazas hay cafés con solera donde tomar una copa o probar la famosa Agua de Valencia.

Al día siguiente nuestra sugerencia es que hagas una excursión para conocer la Albufera, un parque natural de lugar de singular belleza. Puedes visitarla por la mañana y admirar su luminosidad (en Valencia hay más de 300 días de sol al año) y, después, comer en alguno de los muchos y ricos restaurantes del Palmar, Pinedo o el Saler. Si vas por la tarde no puedes perderte la puesta de sol, es impresionante. En este lugar situó el célebre escritor Vicente Blasco Ibáñez su novela Cañas y barro, la pieza costumbrista que relata la forma de vida de principios del siglo XX en estos humedales.

La Albufera al atardecer.

Para terminar el día nada mejor que ir a parar a la playa (llévate el bañador por si acaso) allí podrás ver de cerca el mar que inspiró a Sorolla y respirar el salitre desde una de las muchas terrazas del paseo. Te irás de Valencia con muy buen sabor de boca y con muchas ganas de volver.