Las Fallas: la fiesta en 10 fotos

Recorre la fiesta popular valenciana en imágenes

Eres nuevo en esto de las Fallas, visitas por primera vez la ciudad en esta época o, simplemente, te apetece dar un paseo visual por los puntos básicos del fiestón: este es tu post. Te vamos a enseñar diez aspectos reseñables de la fiesta valenciana por excelencia. Cuando visites la ciudad los verás con tus propios ojos pero aquí, de un vistazo, tendrás en diez imágenes una idea de lo que es esta fiesta de luz, ruido, flores y algarabía para recibir a la primavera.

1.- La mascletà. Es el ruido. En toda su esencia. Ruido por ruido, el suelo tiembla y los oídos retumban. Pero a los valencianos nos encanta sentir ese estruendo que cada día marca que estamos en fiestas. Los disparos, a las 14 horas en la plaza del Ayuntamiento. Pincha en esta foto y verás un vídeo de Fallas que sintetiza lo que es:

La plaza del Ayuntamiento es el escenario del disparo, cada día desde el 1 hasta el 19 de marzo (Foto de TVE).

2.- Los trajes de falleras. Se elaboran en seda, muchos con la técnica del espolín, que es una de las más complejas y sofisticadas para tratar este delicado material. Las falleras los lucen con toda la indumentaria que conlleva el traje y con los famosos moños. Además de verlos por la calle cuando los lucen las falleras tienes la oportunidad de ver históricos ejemplares en el Museo de la Seda, donde hay verdaderas maravillas de este tipo de vestidos.

La delicadeza de los tejidos de los trajes de las falleras es todo un espectáculo visual.

3.- Fallas. Es el monumento satírico por excelencia, parodian a todos pero especialmente a los políticos, que suelen dar para mucho. Hay más de 800 monumentos falleros dispersos por toda la ciudad.

Las fallas se burlan de todo y en ellas salen a relucir las noticias más parodiables que han pasado durante el año.

4.- Las falleras. Son el alma de la fiesta, desfilan ataviadas con el vestido típico y llenan de color las calles. Los días de la ofrenda todo el Centro Histórico se llena de niñas y mayores que llevan flores a la Virgen de los Desamparados y, con los ramos que ellas entregan, se forma un gran tapiz con la imagen de la patrona de Valencia.

Las falleras entregan ramos de flores a la Virgen de los Desamparados en la ofrenda de los días 17 y 18 de marzo.

5.- Paellas. Las verás por toda la ciudad, todo buen restaurante que se precie la tiene en su carta. Pero es que, además, las puedes ver hasta cómo las cocinan en la calle. Los casales falleros hacen concursos de paellas y ver (y por supuesto probar) una de ellas puede ser una divertida experiencia.

6.- Chocolate con buñuelos. Es otro de los atractivos de pasear por Valencia en Fallas: parar, durante el paseo, a merendar un buen chocolate calentito con buñuelos o con churros. Eso también es typical valencià. Con los diferentes tours que tiene Menta Valencia puedes recorrer los sitios imprescindibles y tener las mejores recomendaciones para darte un buen homenaje.

7.- Ir a ver, oler y comprar al Mercado Central. Este es un paseo imprescindible cuando visitas Valencia. Da igual que sea Fallas o no. No te lo pierdas.

8.- Otra escena muy valenciana que puedes presenciar si vienes a la ciudad en Fallas es que te puedes topar, mientras paseas, con un pasacalles compuesto de falleras y músicos que desfilan a ritmo de charanga. Cuenta casi invariablemente con dos instrumentos típicos: la dolçaina y el tabalet. Sonidos valencianos a tope.

9.- Castillo de fuegos artificiales. Este es un clásico de las noches falleras, el cielo se ilumina desde el disparo del castillo en La Alameda, que congrega a miles de personas que acuden a verlo. Hay auténticos artistas de lo pirotécnico en Valencia, no te lo pierdas.

Los disparos de los castillos suelen ser desde la Alameda pero alguno se hace desde la playa, como este que se dispara en La Marina.

10.- Las fallas arden. Cada 19 de marzo todo se quema. Los falleros siempre dicen que las fallas acaban la noche de San José y, ya al día siguiente, comienzan las del año siguiente. Los talleres de los artistas queman su trabajo de todo el año pero se ponen, enseguida, manos a la obra con las fallas siguientes. Esa es la filosofía de la fiesta. Todo arde y todo vuelve a empezar.